04 agosto 2011

LA HISTORIA DEL CHACO

El Chaco tiene una historia distinta a la mayoría a otras provincias del país que se conformaron inmediatamente después de 1810. Fue un territorio que se mantuvo ocupada por los Pueblos Originarios hasta fines del siglo XIX. Las provincias vecinas de Tucumán, Santiago del Estero, Santa Fe y Corrientes llevaron adelante fallidas políticas de incursión y exploración, y firmaron acuerdos y tratados de paz con los habitantes originarios.

Una vez finalizada la Guerra de la Triple Alianza el Estado Nacional necesito marcar presencia efectiva en la zona del Chaco, para ello creo la Gobernación del Chaco, inicio campañas militares contra los naturales, fomento la instalación de capitales privados, impulso la llegada de inmigrantes y fundo ciudades en la margen del río Paraná y a la vera de los ferrocarriles.




“La finalización de la Guerra de la Triple Alianza y la Discusión del Tratado de Paz y límites con el Paraguay, son dos hechos vinculados estrechamente con la creación del Territorio Nacional del Chaco” (LOPEZ PIACENTINI; 35).

La creación del Territorio del Chaco, el trazado de sus primeras ciudades y su posterior colonización, tienen su origen inmediato en la liquidación de la Triple Alianza y la discusión del Tratado de Paz y límites con el Paraguay” (ALUMNI, 1951:164). Institucional y políticamente podemos dividir a la historia del Chaco en tres grandes Etapas de la Historia del Chaco:

La gobernación 1872-1884
El territorio 1884-1951
La provincia 1951- hasta nuestros días.

Gobernación del Chaco 1872-1884

En 1872 por Ley 576 se efectiviza el primer gobierno del Territorio del Chaco, designándose gobernador al General Julio de Vedia. La capital fue Villa Occidental frente a Asunción, en la ribera del Río Paraguay. Esto generó un problema limítrofe, que se resolvió 1879 por un arbitraje internacional a favor del Paraguay. La capital temporalmente fue trasladada a la Isla del Cerrito (entre 1876 y 77) y luego a la ciudad de Formosa (de 1879 hasta 1884).

A principios del año 1878 llega el primer gran contingente de inmigrantes (67 familias) provenientes de Italia que desembarcan a orillas del Rió Negro en el antiguo puerto de San Fernando dando origen a lo que será la ciudad de Resistencia. Paralelamente se iniciaron expediciones militares de carácter exploratorio con el objetivo incorporar tierra al sistema productivo.

En 1874 por Ley 686 se crea la Jefatura Política del Chaco con dependencia del Poder Ejecutivo Nacional para atender el territorio del Chaco Austral. Para el cargo es designado Aurelio Díaz, pero desde 1875 la jefatura volvió a depender del Gobernador del Territorio, diluyéndose las funciones de ese cargo.

El Territorio Nacional del Chaco 1884 -1951

La Ley 1.532 de 1884, llamada de Organización de los Territorios Nacionales, dividió el Gran Chaco en dos gobernaciones: la de Formosa y la del Chaco. En el Territorio Nacional del Chaco, fue designado como Gobernador el Coronel Manuel Obligado con sede de gobierno en la Colonia Resistencia. El Territorio del Chaco se fue disgregando y perdiendo territorios Durante este período se definieron los límites vigentes.
El ferrocarril actuó como ariete de penetración en el monte, desde Santa Fe llegando a La Sabana en 1892 y a Resistencia en 1907. A partir de 1909, comenzaron los trabajos para unir a través de los rieles las localidades de Barranqueras y Metán (Salta).

La explotación forestal se complementó con la industria taninera, dando paso a la instalación del capitalismo industrial (hasta 1920). En paralelo, las campañas militares pusieron fin a los últimos malones indígenas, obligando a los pueblos originarios a ofrecerse como mano de obra asalariada.

Simultáneamente el crecimiento demográfico fue descomunal por el fomento nacional de la inmigración europea, que conllevó la fundación de ciudades en el territorio.

1951 en adelante la provincia
La Ley 14.037 de 1951, convierte al Chaco en provincia junto al territorio de La Pampa. A fin de ese mismo año se sancionó la primera Constitución Provincial de carácter social, basada en la reforma de la Constitución Nacional de 1949. En ella se nomina a la provincia “Provincia Presidente Perón”.
La elección del primer gobernador se concretó en abril de 1953 y la asunción en junio de ese mismo año. La fórmula del Partido Justicialista: Gallardo - Bittel gana esa elección.
Con el Golpe de Estado de 1955 que derrocó a Perón, las autoridades designadas en la provincia decretan el cambio de nombre a “Provincia de Chaco” retomando la denominación del Territorio. La Constitución provincial fue dejada sin efecto, hasta la sanción de la Constitución en 1957, la que tuvo vigencia hasta 1994.
Desde 1953 hasta 1983, fueron elegidos 4 gobernadores y sus mandatos interrumpidos por 16 interventores de facto.
A partir de 1983, se eligieron y cumplieron mandato 7 gobernadores de diferentes partidos políticos.

Provincialización
El día 8 de agosto de 1951 – fecha de promulgación de la ley aprobada en junio de ese año por el Congreso-, marcó el inicio del proceso de incorporación de nuevas provincias a la Nación, dando cumplimiento a lo establecido la Constitución Nacional de 1853, otorgando la autonomía institucional a los hasta entonces Territorios Nacionales del Chaco y La Pampa, mediante la promulgación de la Ley N° 14.037 que las declaró provincias.
La Ley de Provincialización de territorios nacionales constituyó un viejo anhelo tanto de sus habitantes como de los poderes Ejecutivo y Legislativo de la Nación.
El proceso de organización provincial comenzó con la sanción de la constitución en diciembre de 1951y concluyo con la elección del primer gobernador de la provincia en abril de 1953 y asunción en junio de ese mismo año.-

Constitución
Hasta la Reforma de la Constitución Nacional de 1949, los ciudadanos de los Territorios nacionales, solo podían participar en las elecciones de autoridades municipales. Los gobernadores eran designados por el Poder Ejecutivo Nacional con acuerdo del Senado.
El proceso de provincialización iniciado el 8 de agosto de 1951, posibilitó el ejercicio pleno de los derechos políticos de los ciudadanos del Chaco, habilitando la elección de los convencionales para sancionar su propia constitución, en la misma oportunidad de primera participación en la elección de representantes nacionales.
La Convención Constituyente fue elegida el 11 de noviembre de 1951, de acuerdo a la Ley 14037. Estuvo integrada 15 convencionales, 7 ciudadanos provenientes del sector político y 8 del sector gremial. Fue aprobada el 21 de diciembre de ese año.
Se basó en los principios de la Constitución Nacional de 1949, que incorpora los derechos sociales, políticos y económicos. En su artículo 33, refiere a la composición del Poder Legislativo, dispone que el mismo será ejercido por una Cámara de Representantes, la mitad de cuyos integrantes será elegido por el pueblo de la provincia y la otra mitad por ciudadanos pertenecientes a entidades regidas por la Ley Nacional de Asociaciones Profesionales, debiendo integrarse las listas con miembros de dichas entidades.
En su preámbulo se lee: “Nos los representantes del pueblo trabajador de la Provincia Presidente Perón…..”

Chaco: del territorio a la provincia

El proceso de provincialización del Chaco, fue madurando a lo largo de muchos años, cuando ya este Territorio contaba con la cantidad suficiente de habitantes para adquirir la categoría jurídica de provincia. Existían intereses económicos, políticos y sociales que trababan las posibilidades de que legitimar lo que legalmente estaba prescripto en la legislación vigente, acerca de la transformación de los territorios nacionales en provincia.

Una de las trabas a la transformación de Chaco en provincia estuvo dada por la presión que ejercía la oligarquía terrateniente correntina, que desde fines del siglo XIX, quería transformar al Chaco en campo de pastoreo del ganado rústico que se criaba en la orilla opuesta. Desde la Cámara de Diputados de la Nación se argumentaba en que toda inversión en materia de colonización significaba un absoluto fracaso, por lo que era necesario mantener la situación de status-quo, hasta tanto fueran despejadas las fuerzas de “la barbarie” que impedían el “progreso y la civilización”.

Después de la entrada “ a sangre y fuego” de la Campaña del General Victorica (1884), lo que significó la derrota militar de los pueblos originarios, y su transformación en mano de obra barata, para el modelo forestal-taninero-azucarero que se estaba implementando, quedó expedito el camino para la radicación de un sistema económico que tuvo a la irracionalidad económica como núcleo organizador de la política de devastación de miles de hectáreas de quebracho colorado y otras riquezas naturales.

De esta manera vemos el doble proceso de ocupación del espacio que adoptó el grupo social dominante con sede en Buenos Aires: por un lado ampliar la frontera agropecuaria para satisfacer las necesidades de un mercado colonial que le había asignado a la Argentina el rol de país agroexportador, y por otro lado mediante una política genocida se disponía a despejar las tierras ocupadas por los pueblos originarios y entregar la misma a las fuerzas “ del orden y de la administración”.

Cuando el ciclo forestal-taninero fue entrando en un cono de sombras, ya el Chaco estaba numéricamente en condiciones de ser provincia, pero a los que aspiraban a quedarse con las grandes porciones de tierra arrebatadas al indígena, les convenía más negociar esa entrega con autoridades porteñas antes que con gobernantes locales. De ahí el escaso interés de los grandes dueños de la tierra en provincializar el Chaco.

Las fuerzas económicas, políticas y sociales del campo y la ciudad bregaron durante decenas de años para que este territorio fuese transformando en provincia. Pero todos los proyectos presentados a las autoridades nacionales, fueron quedando en el olvido y la provincialización postergándose.

Fue necesaria la llegada del peronismo al poder político para que nuevamente cobre vigor la idea de provincializar el Chaco. Fue entonces que el sindicalismo chaqueño, que tenía una fuerte impronta de luchas, ubicados entre los más combativos del país (las huelgas de La Forestal, de Las Palmas y las Huelgas algodoneras de 1934 y 1936 así lo demuestran), mostró sus cartas como polo de reclamo de la provincialización.

Fue Eva Perón, la principal aliada de este proceso que se extendió entre 1949 y 1951 y que dio sus frutos con la promulgación de la Ley de Provincialización (14.037) el 8 de agosto de 1951, por la que se convocaba a la elección de Constituyentes para la redacción y aprobación de la Carta Magna de la nueva provincia.

La Convención Chaqueña, que deliberó con la sola presencia de convencionales del justicialismo. Durante el año 1951 en la Escuela de Niñas ( hoy EEP Nº 2 ), tomando como modelo la Constitución Nacional de 1929 y la doctrina de las 20 verdades del Justicialismo aprobó la Constitución de la provincia Presidente Perón.

Esta Constitución de neto corte obrero, coloca en primer plano a las fuerzas del trabajo como los constructores de la organización provincial, a través de una Cámara de Diputados que estaba formada en un 50 % por las fuerzas que provenían de las Asociaciones profesionales.

El Preámbulo de la misma sostiene: “ Nos los representantes del pueblo trabajador de la provincia Presidente Perón…"da presencia de vanguardia a los trabajadores del Chaco, inspirándose en el 4º artículo de las veinte verdades del peronismo que sostiene que “en la Argentina existe una sola clase de hombres: los que trabajan".

Otros artículos de esa Constitución colocan en un primer plano del protagonismo fundacional a los hombres de trabajo del campo y la ciudad, dando lugar a las reivindicaciones por la cual el sindicalismo chaqueño. Con sus diversas ideologías, había venido luchando durante cincuenta años (Socialistas, anarquistas, comunistas y peronistas).

Esta legislación constitucional fue una avanzada en lo referido a los derechos de los trabajadores del Chaco, que la coloca entre las más progresistas, en ese momento histórico, entre las Constituciones de América Latina y constituía lo que Eva perón pretendía fuera prueba de ensayo del Socialismo Nacional, del que era partidaria.

Esta Carta magna posibilitó la elección de un miembro de los sindicatos como gobernador de la flamante provincia: don Felipe Gallardo (del Gremio de Oficios Varios) acompañado como vicegobernador por el escribano Deolindo Felipe Bittel.

Elegidas las autoridades provinciales, (por primera vez los chaqueños elegían a sus gobernantes en abril de 1953 y en junio asumieron), se levantaron los cimientos de una estructura organizativa que resultaron las columna vertebral de la actual organización estatal y privada, y tuvo vigencia solo por dos años, ya que el golpe cívico-militar del año 1955, truncó el desarrollo de la obra fundadora de esta novel provincia.

No hay comentarios:

Publicar un comentario